Me entrevistaba hace poco la periodista Isabel Rubio respecto a algunos aspectos de cómo abordar el tema de la muerte con personas en fases terminales. Este es un extracto de la entrevista.
¿Es recomendable hablar de la muerte con pacientes que saben que se van a morir o es mejor evitarlo? ¿Y con los que puede que se mueran o que no?
Evitarlo solo dificulta o imposibilita que puedan tener un papel activo en su propio proceso vital, en este caso en el final de él. Habrá que abordar el tema de la forma más adecuada en cada caso, eso por descontado, pero no hablar de ello es hacer a la persona más víctima aún del proceso al que se enfrenta. Evitar el tema de forma casi fóbica puede producir sentimientos de alienación y soledad extrema en la persona que se enfrenta a un momento tan trascendental. Cancer Research UK por ejemplo tiene un artículo breve pero muy bueno aquí: https://www.cancerresearchuk.org/about-cancer/coping/dying-with-cancer/coping-with-the-news/talking-about-dying
¿Conviene que expresen su inquietud frente a este tema o que lo eviten?
Por supuesto que lo expresen. De otra forma dicha inquietud, que puede llegar a ser auténtica angustia o desesperación existencial, complicará más aún el proceso y lo dificultará todo no solo en lo psicológico y relacional sino incluso en lo médico. Si la familia no se siente capaz hay psicoterapeutas expertos en el tema que pueden acompañar al paciente tanto como a la propia familia. El Portland Institute for Loss and Transition (https://www.portlandinstitute.org) por ejemplo tiene un excelente y amplio programa de capacitación y actualización de tales profesionales alrededor del mundo entero.
¿Qué consejos podemos seguir para hablar con personas enfermas sobre este tema?
En esencia uno muy claro: ninguno de nosotros tiene certeza alguna de qué sucede tras la muerte y todos somos peregrinos en busca del sentido de la propia vida cuando nos enfrentamos a la muerte. Hay que acompañar el proceso de morir desde la humildad y sobre todo creando un espacio en que la persona le pueda dar sentido (eso ha demostrado ser esencial, véase por ejemplo este estudio https://papers.ssrn.com/sol3/papers.cfm?abstract_id=2964862) acomodándolo a su propio sistema de creencias y valores.
¿Qué tipo de mensajes no debemos decir? ¿Puedes poner algún ejemplo?
En general todo lo que intente "tranquilizar" puede parecer que le quita importancia a lo que está sucediendo y por lo tanto ser vivido como estúpido e incomprensivo. Mejor callar y coger la mano de la persona transmitiendo amor y compasión por ejemplo que decir cosas del estilo de "¡ánimo que saldrás de esta..!"
También la "falsa empatía" con mensajes estilo "sé muy bien por lo que estás pasando" se vive de forma alienante... al fin y al cabo nadie que no haya muerto sabe a qué se enfrenta alguien que está en una fase terminal. Incluso en el caso de alguien que hubiese pasado por un proceso similar y hubiese sobrevivido contra pronóstico, sus "sé como te sientes" estarían teñidos de su propia perspectiva indefectiblemente personal y subjetiva.
¿Qué tipo de mensajes sí pueden ser una buena opción? ¿Puedes poner algún ejemplo?
Todo aquel que transmita empatía, amor, compasión, comprensión, sentido... Por ejemplo (y siempre que la relación con la persona lo haga adecuado, por supuesto):
Te quiero.
Gracias por enseñarme a...
Siempre recordaré cuando tú y yo...
Espero que me disculpes por...
Siempre quise decirte que...
Siempre quise preguntarte...
Me has influido para siempre en...
Me acuerdo de nosotros juntos cada vez que...
Me pregunto qué me aconsejarías en el futuro si...
Mi vida ha sido diferente gracias a ti porque...
Algo que he aprendido de ti y que siempre llevaré conmigo es...